lunes, 15 de septiembre de 2014

UN MODO DE ESTAR LEJOS

Presentación de "Incomunicaciones" de Rodrigo Arroyo[1]
Por Julieta Marchant
Ediciones Inubicalistas 2013

Escribir y ser escrito. Leer y ser leído. El que escribe también es escrito cuando, empujando la mano sobre el papel, se enfrenta a la fragilidad de un lenguaje que porta el deseo de esa mano. La mano tiembla y teme. La mano, esta mano, piensa un modo de escribir en una lejanía, en una opacidad, fuera de la intención violenta de la captura y de la representación: «La escritura es posible como un modo de estar lejos» (Arroyo)[2]. Asistimos, entonces, en la escritura de Rodrigo, a la apertura del poema, a esa hospitalidad que Derrida ve en la literatura y que no es más que no negar el porvenir, dejar ingresar al otro al lenguaje que, de antemano fracturado, vamos tejiendo lentamente a través de las palabras y que el otro que leerá, que recibirá esa escritura, pueda firmarlo en ese recibimiento.